
El día 10 de diciembre cuando apareció nuestro proyecto como uno de los elegidos en la lista de JusticeMakers fue una grata sorpresa y sobre todo un aliciente especial para continuar con el trabajo arduo por la defensa permanente de los Derechos Humanos, parecía increíble que entre tantos postuladas y postulados, fuera este proyecto uno de los que se lograría realizar. En este contexto de Colombia donde la formalidad y apariencia de la democracia oculta la vivencia cotidiana del actuar delincuencial de la policía, su complicidad en vulneraciones de derechos humanos y su alianza con actores armados, es satisfactorio que esta problemática preocupe y motive el apoyo para ayudar a transformarla desde un pequeño ámbito como el derecho.
Por otro parte es muy importante saber que existen hombres y mujeres en todo el mundo interesados e interesadas por hacer del ejercicio del Derecho y sobre todo de la defensa penal una actividad al servicio de aquellas personas a las cuales de forma sistemática le son vulnerados sus derechos.
En Colombia y concretamente en la ciudad de Medellín es muy importante trabajar por la protección de las libertades personales, porque es recurrente que el comportamiento de la policía sea ilegal, vulnerando la propia normatividad que le sustenta su existencia, el abuso de autoridad y sobre todo la privación de la libertad a la población juvenil, limitando sus derechos fundamentales consagrados en la Constitución. La comunidad podrá acceder a capacitaciones sobre el manejo jurídico en las detenciones arbitrarias, asistencia técnica en el ámbito jurídico, se realizaran campañas de denuncia e información sobre las detenciones arbitrarias en la ciudad; en tal sentido se lograra obtener una mayor información y se podrá promover el como hacer respetar los derechos a través de acciones legales pertinentes cuando han sido detenidos de forma arbitraria o por razones irrisorias que no ameritan dicha sanción, esto se forma indirecta empezara a generar inquietudes al interior de las fuerzas de policía para que revisen sus procedimientos internos y sobre todo su permanente capacitación en el respeto a ultranza de los derechos fundamentales de las personas.